
Acné vulgar: algunos datos sobre este padecimiento
El acné es una enfermedad inflamatoria crónica de la unidad pilosebácea de la piel, resultante del aumento de la producción de grasa(sebo) inducida por andrógenos, alteración de la queratinización, inflamación y colonización bacteriana de los folículos pilosos de la cara, el pecho, el cuello y la espalda por Propionibacterium acnes. Sigue siendo incierto qué factores desencadenan exactamente la enfermedad y cómo el tratamiento afecta su curso. Sin embargo, se cree que los antecedentes familiares y la dieta desempeñan un papel importante en la misma. Además de los problemas físicos, el acné suele estar asociado con efectos negativos sobre la autoestima. Se cree que las cicatrices faciales debidas al acné afectan a alrededor del 20% de los adolescentes.
Aunque no se ha determinado claramente un tratamiento ideal para el acné, en la mayoría de los casos se puede encontrar un tratamiento adecuado para reducir las lesiones. La efectividad comparativa de las terapias comunes para el acné tópicas versus sistémicas es escasa, particularmente aquellas con el apoyo técnico apropiado. La mayoría de las terapias tópicas conocidas utilizan una combinación de peróxido de benzoico, retinoides y antibióticos que generalmente mejoran y regulan el acné leve a moderado. Los casos de acné inflamatorio más grave generalmente necesitan antibióticos orales combinados con peróxido de benzoico tópico para prevenir organismos resistentes a los antibióticos. El tratamiento con anticonceptivos orales combinados puede ayudar a las mujeres con acné.
Aunque las incidencias máximas se dan con frecuencia en la pubertad, el acné puede afectar a todos los grupos de edad. La dieta alta en carbohidratos y los productos lácteos se consideran como factores agravantes.
La mayoría de los pacientes con acné recibirán un tratamiento tópico, ya sea como monoterapia o en combinación con una terapia con medicamentos que generalmente incluyen antibióticos, según la gravedad del caso. Los agentes tópicos actualmente disponibles afectan uno o más de los cuatro factores patogénicos principales responsables del desarrollo de acné, hiperqueratosis, respuesta inmune, colonización microbiana e inflamación.
Se ha demostrado que el uso de un dispositivo de luz azul LED en una terapia combinada con el uso de cremas patentadas resulta eficaz para reducir las lesiones inflamatorias, típicamente después de 3 semanas de aplicación. El tratamiento está libre de dolor y efectos secundarios. El dispositivo de luz azul LED ofrece una alternativa valiosa a los antibióticos y a los tratamientos tópicos potencialmente irritantes. La fototerapia con luz azul, que utiliza una fuente de luz LED de banda estrecha, parece ser una terapia adicional segura y eficaz para la gravedad leve a moderada, sin efectos adversos significativos a corto plazo.